martes, 1 de julio de 2008

Dulce amargo

Obsérvenla.
¿Qué tiene de inocente esta paleta? Nada ¬¬
¿Qué tiene de dulce? Mucho ¬¬
¿Qué tiene de especial? Que nadie te la regaló ¬¬
¡Eso tiene! :(
Hoy empezó en Argentina una semana que cada año, por algún u otro motivo, odio.
Sí, la semana de la dulzura (?).
Excusa perfecta de los hombres (cierto tipo de hombre), para halagar compañeras de trabajo o estudio y robar algún que otro beso. Claro que son todos besos en la mejilla, carentes de cualquier tipo de emoción, casi equivalentes a un insulso saludo matinal (aunque deseemos lo contrario, el príncipe azul no existe, y en caso de existir, no va a venir a tocar timbre con un Bon O Bon gigante a las 3 de la tarde).
Decía que odio esta semana porque siempre me encuentra (y algunas mujeres se sentirán identificadas seguramente) en alguna de estas situaciones:

- Situación 1: Felizmente de novia. No tiene gracia. De hecho terminás reprochándole algo del estilo: "Claro, claro, ahora porque es la semana de la dulzura me traés un chocolate pero el resto del año nunca tenés ese detalle eh".

Aquí pueden presentarse dos casos:

a) El chico en cuestión es un amargo al que estas fechas le resbalan, en cuyo caso te regala la golosina casi por obligación o bien lo pasa olímpicamente por alto. Te quedás pensando: ¿Por qué a mí siempre me tocan novios amargos? ¿Por qué no me tocó un romántico como el novio de *inserte nombre de amiga aquí*?

b) El muchacho es un tierno y cae con una golosina riquísima que devorás en un minuto y en definitiva, el beso pasa a un segundo plano porque claro
, es tu novio, es algo demasiado habitual.

- Situación 2: Completamente sola. No sólo no tiene gracia sino que hasta se vuelve triste. Ves pasar el día 1 y pensás: "bueno, seguro mucha gente no se enteró"; el día 2 creés que todavía quedan 5 días; el día 3 te ilusionás y resulta que tu amigo se compró esa Tita para él y te dice "¿querés?" (con la boca llena y en respuesta a tu mirada inquisidora); el día 4 ya tenés en MSN un nick parecido a: "odio la semana de la dulzura"; el día 5 ya no te importa (por dentro sí pero te las das de rebelde); el día 6 pensás: Ahora o nunca, ¿si empiezo a regalar yo? (y no lo hacés porque te da pachorra ir al quiosco); y el último día acabás criticando esto del consumismo compulsivo que nos impone la globalización (???).

Aclaración: Estos eventos pueden presentarse en orden diverso, según la complejidad de la muchacha a la que se apliquen.

¿Solución? Eliminar esta semana de la faz de la tierra. O que me compren una paleta como la de la foto para mantenerme callada (aunque existan otras formas de callarme, no vienen a cuento y la comida es la que menos costo tiene).

3 comentarios:

Hipolito dijo...

Buenísimo el post... Disculpá que este medio lejos como para regalartela (a la paleta digo), pero en contraposición me diste un dato re importante para quedar muuy bien con mis amigas de acá, asii que gracias y seguí dando estos sabios consejos. Nos vemos.

Anónimo dijo...

jajajjaja!!! Buenisimo Coral!!! Dios, cuanta razón!!!!
Yo podría ser un poco la situación 2...como siempre al final termino criticando el consumismo xDDD
En fin, uno nunca sabe que pasara...al final de la semana tal vez nos demos cuenta que...


SACARON LA SEMANA DE LA DULZURA!!! xDDDD


Saludoss!!! :)

Ericarol dijo...

Gracias por el dato para cultura general que voy a presumir antes mis amigos "sabian que en la Argentina hay una semana de la dulzura?????" Propio del ser humano, para todas las fechas siempre habrán comentarios en pro o en contra. Si estuviera allá, seguro yo también la odiaría. Un abrazo empalagoso (a propósito de la celebración, jejeje).